La crisis financiera y de deuda soberana ha puesto en evidencia la necesidad de intensificar la tutela penal de los mercados financieros. No obstante, los reguladores nacionales se han percatado de la dificultad de hacer frente a conductas que atentan gravemente contra la integridad del mercado y que, en muchas ocasiones, se sitúan más allá de los límites propios de su jurisdicción. El presente trabajo analiza determinados aspectos de la aproximación estadounidense y europea a este respecto para finalizar examinando el ordenamiento español. Así, además de notar ciertos déficits de regulación, se incide en cuatro ámbitos especialmente problemáticos relacionados con la manipulación de mercado: ventas en corto, negociación de alta frecuencia, dark pools y rating de deuda soberana.